
El dúo Samy Elbanna (también cantante) / Arttu Lesonen hace un excelente trabajo a la guitarra, ya no sólo a nivel rítmico y de riffage -la base del thrash- sino a nivel solista, y es que sus mano a mano recuerdan al duo finés Roope / Jiri de los míticos STONE. Salvando las distancias, y teniendo en cuenta que son una de sus influencias, estamos ante dos bandas muy similares. Lost Society no inventan la rueda, simplemente ofrecen lo mejor del thrash en unas canciones vertiginosas a las que ahora se añade un toque groove y rockero que es tal vez lo que le faltaba a Terror Hungry (2014, Nuclear Blast). "I Am the Antidote", primer sencillo, es también el primer ejemplo.
¿Un medio tiempo abriendo un disco de Lost Society? "I Am the Antidote" es un tema groove con unos leads y una técnica que sorprenden. La canción engancha desde el principio, y con apenas una escucha querrás activar el repeat, aunque os adelantamos que el LP es tan redondo que corréis el riesgo de escucharlo varias veces seguidas.
Un thrash más enfocado al heavy metal tradicional y al rock sureño se nota en la mayoría de canciones, incluyendo una versión del "P.S.T. 88" de Pantera y un completo rework de "Terror Hungry", ahora en versión californiana, que aunque escuchemos junto al tema que da nombre al segundo disco lo lograremos distinguir. Y también es áltamente adictiva. Antes de llegar ahí hemos tenido que pasar por “Riot”, uno de los mejores temas del disco con partes demenciales que recuerdan a Rage Against the Machine, “Mad Torture”, donde se nota más la influencia de Children of Bodom, o los dos temas Lost Society del trabajo, “Rage Me Up” y “Hangover Activator”.
4/5
En resumen, un festival de thrash y groove con temas para todos los gustos, una composición más trabajada y variada, y la confirmación definitiva de que Lost Society no son tan sólo un copy-cat, y que con apenas 20 años son uno de los nuevos grupos finlandeses ya no a tener en cuenta, sino a seguir muy de cerca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario